En México, pocas cosas nos unen tanto como una canción de despecho.

¿Quién no ha cantado a gritos letras que dicen: “Tu muñeca, eso soy…” mientras brinda por alguien que ya se fue?

Hoy quiero que reflexionemos: ¿por qué convertimos el despecho en un ritual de autodestrucción?

🌿 Salas de despecho: dolor disfrazado de diversión

Las salas de despecho están de moda: bares donde ir a llorar bailando, beber de más, cantar frases que alimentan la herida.

Sí, parece divertido… pero, ¿qué pasa cuando vuelves a casa?

La música deja de sonar y el dolor sigue ahí, más grande, más pegajoso, más adictivo.

 

✨ La profecía autocumplida del sufrimiento

La tanatología enseña que el duelo necesita un proceso: sentir, elaborar, resignificar.

Pero cuando solo lo alimentamos con canciones que nos dicen “nunca saldrás de esto”, creamos una profecía autocumplida:

👉 Creemos que el sufrimiento nos define.

👉 Nos convertimos en “la muñeca” que alguien usa y desecha.

👉 Repetimos relaciones iguales.

 

🌼 Del despecho al amor propio

No se trata de no llorar.

Se trata de elegir qué haces con ese llanto.

La música puede acompañarte a sacar lo que duele… pero después necesitas un plan:

🌱 Parar el bucle de victimismo.

🌱 Ver por qué elegiste esa relación.

🌱 Recuperar tu autoestima.

🌱 Crear rituales de cierre sanos, no solo canciones.

 

🌙 Sí se puede dejar de sufrir

En cada sesión, acompaño a mujeres y hombres que llegan con el corazón roto.

Pero juntos descubrimos que detrás de cada ruptura hay una oportunidad:

🌿 De mirar tus heridas viejas.

🌿 De resignificar tu forma de amar.

🌿 De dejar de suplicar amor y empezar a elegirte.

 

✨ ¿Qué puedes hacer hoy?

✔️ Reconoce tu dolor.

✔️ Observa qué canciones o ambientes alimentan la herida.

✔️ Busca espacios donde puedas hablar, comprender y resignificar tu ruptura.

✔️ Agenda tu sesión de tanatología: ahí no solo llorarás… también descubrirás cómo levantarte.

 

💛 No estás sol@. No eres una muñeca  ni un ken roto.

Si sientes que te quedaste atrapad@ en el despecho, este es tu recordatorio: mereces dejar de sufrir por lo que ya no es tuyo.

Hoy puede ser el inicio de tu cierre real.

 

📌 Agenda tu cita presencial o en línea.

Te ayudo a transformar tu duelo en un renacer.